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Hacer que un bebé sea sociable es un trabajo continuo que ha de empezar el mismo día que llega al mundo.

Hay bebés que, de forma innata, son muy sociables, sonríen a menudo cuando alguien les dice algo, incluso con personas que no conocen, les encanta pasar de unos brazos a otros.

En cambio, hay bebés poco sociables a los que no les gusta nada que les cojan, sobre todo si son personas que no conocen, y son menos dados a interaccionar con la gente que tienen alrededor.

¿Qué es lo que determina que un bebé sea sociable? ¿Cómo ayudar a mi hijo a ser más sociable? Estas son algunas preguntas que se hacen muchas madres y padres primerizos ya que es una preocupación común en la mayoría de personas.

En primer lugar, has de saber que el temperamento del bebé (lo innato) es una parte condicionante en el proceso de socialización porque determina la cantidad de estímulos externos que necesita el pequeño/a para entretenerse (las personas introvertidas no necesitan tantos estímulos externos como las personas extrovertidas).

Pero, la forma de hablarle, de tratarle, de acariciarle, la manera en que te relacionas con los demás cuando estás con tu bebé (lo adquirido) marcarán las primeras pautas de su conducta. Por lo tanto, de ti también dependerá una parte fundamental en la sociabilidad de tu hijo/a.

Así que si quieres aprender más sobre este tema, a continuación vamos a ver más detalladamente cómo lograr que un bebé sea más sociable.

¿Cómo hacer que tu hijo sea más sociable?

Cómo hacer que tu hijo sea más social, comunicativo, abierto, confiado, extrovertido o charlatán, tiene muchas respuestas, veamos algunas de ellas:

1-La comunicación verbal

La comunicación es el estímulo más potente para ayudar a socializar a un bebé.

Si le explicas lo que haces, le hablas de cómo te sientes, le describes lo que está sucediendo a su alrededor, le estás dotando de una herramienta muy útil, el lenguaje, y podrá adquirir la costumbre positiva de comunicarse abiertamente y de forma natural.

Saber expresar qué quiero o qué es lo que necesito es un aspecto fundamental en las relaciones sociales.

2-La comunicación corporal

El contacto físico también es un estímulo vital para ayudar a un bebé a ser más sociable. Los abrazos, las caricias o los mimos favorecen la interacción y acostumbran al bebé al contacto corporal con las personas de su entorno.

Si tú le proporcionas cariño físico probablemente entenderá que forma parte del amor expresar corporalmente, y el día de mañana tendrá facilidad para ser una persona cercana y cariñosa con los demás.

cómo hacer que mi hijo sea más sociable

3-El contacto con personas diversas

Es normal que al principio un bebé solo se sienta a gusto cuando lo sostiene su madre o padre y llore cuando lo coja alguien diferente. El instinto de supervivencia prevalece y el bebé responde con agitación ante unos brazos desconocidos.

Pero, el problema es que a veces este comportamiento hace que quieras rescatar al bebé o que la persona te lo entregue corriendo para que lo tranquilices y entonces el bebé no tiene tiempo de adaptarse a esa nueva persona.

Evidentemente, si está llorando mucho y ves que está muy nervioso/a o alterado/a lo mejor es cogerlo/a y calmarlo tú, pero siempre hay que dar un poco de margen para ver si se va calmando por sí solo o la persona que lo sostiene al final sabe cómo hacerlo.

El hecho de que aprenda a adaptarse a otras personas es un beneficio emocional que le repercutirá de forma positiva. Aprender que cada persona es diferente y le habla y le trata de forma distinta le aportará una parte fundamental de sociabilizar, la diversidad.

4-Los diferentes espacios

Igual que sucede con la adaptación a las diferentes personas, es muy importante que tu hijo o hija se adapte a los diferentes entornos y espacios. Un bebé al que lo llevan a todas partes siempre tendrá más capacidad de adaptación que un bebé que va solamente de casa al parque.

El hecho de aprender a sentirse cómodo en diferentes entornos le proporcionará seguridad y la seguridad es básica para socializar de forma positiva.

5-La vergüenza y el miedo

Ante la pregunta de ¿por qué mi hijo no es sociable? hay una tendencia generalizada a creer que es por miedo o vergüenza.

Y sí que es cierto que es un motivo, pero la falta de motivación, la falta de ejemplo, la falta de costumbre o el temperamento introvertido son otros motivos igual de comunes.

6-Tu lenguaje

Lo que le dices y cómo se lo dices también puede influir mucho en la futura sociabilidad de tu bebé.

Si desde pequeños/as escuchan constantemente que son tímidos/as, que tienen vergüenza, que son temerosos o que no se relacionan bien con los demás adoptarán ese papel con suma facilidad y ya no necesitarán esforzarse en encontrar su auténtico yo, porque tú ya le habrás dicho cómo es.

Cuando le hables a tu hijo/a sobre su forma de comportarse, siempre es mejor referirse a ese comportamiento como algo concreto y no como norma general.

Es más positivo decirle ¿hoy tienes el día tímido? a decirle ¿eres tímido/a?. De igual modo, es siempre mejor decir ¿este comportamiento es egoísta? a decir ¿eres egoísta?.

Lo que tus hijos/as oyen que dices sobre ellos tiene un enorme peso en cómo luego se ven a sí mismos/as.

ayudar a un bebé a sociabilizar

Como ves, hay muchas cosas que puedes hacer para lograr que un bebé sea más sociable. Motivar y estimular ha de ser un ejercicio constante, pero también lo ha de ser observar y reflexionar sobre su parte más innata.

Un niño/a con tendencia retraída y solitaria puede ser muy sociable si se le motiva para ello, pero también puede sentirse muy frustrado/a si ve que no es capaz de ser o hacer lo que tú esperas.

Así que, cuando te preguntes qué hacer para que tu hijo/a sea más sociable, recuerda:

  • Primero, ten presente el temperamento que tiene, (lo innato en su personalidad), pues hará que tienda a ser más o menos sociable.
  • Segundo, el tipo de educación emocional que ha recibido (lo adquirido de su personalidad), pues es lo que ha visto en los adultos de su entorno.
  • Y tercero, tu propio comportamiento, porque al final tus hijos/as son un pequeño reflejo de cómo actúas tú con ellos/as.

Por otro lado, a medida que van creciendo son muy importantes para estimular la sociabilidad de un niño, los valores que tú y el entorno le van inculcando; tales como aprender a compartir, a ser humilde y generoso, a tener autonomía, o a controlar las horas que pasa jugando a videojuegos (aquí puedes ver pros y contras del uso de la tecnología en bebés) y las que pasa jugando en el parque con otros niños.

Al final, hacer que un bebé sea sociable depende de una gran variedad de circunstancias, y algunas externas que no puedes controlar, pero lo que sí está en tu mano y lo que sí puedes controlar son todas las herramientas que como madre o padre le puedas dar.

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